02 octubre, 2013

Cuando todo y nada cambia

Ante la sorpresa de ver que no tan solo 'solías escribir', sino que las palabras cargadas de rojo saltan aún en estas notas, encuentro con algo de orgullo y emotividad muy personal los pequeños cambios que han quedado en ese pequeño inconsciente inquieto y vivo. Todo y nada cambia. El tiempo ha dejado atrás un invierno, una primavera, un verano. Las hojas nuevamente se caen y los árboles retoman su sonido ronco cuando el viento fuerte los sacude. Es estremecedor, simulan los fortissimo que solo el mar sabe interpretar, dejan la vida y la historia en cada hoja amarilla o rojiza que cae desde lo más alto. Nuevamente llega el otoño. Todo y nada cambia.

Mis manos están cargadas de recuerdos -qué recuerdos!- que me transportan a cualquier situación marcada con fuego vivo. Las cicatrices permanecen, algunas son de amor, algunas de guerra, algunas de soledad, algunas de ... , algunas de tristeza, algunas de gozo y alegría. Algunas son espinas. Algunas son pétalos. Cuando mi mente las dibuja en mis manos regresa no solo un hecho en sí mismo. Se forma un contexto, una escena, un marco, casi que se siente el óleo y la trementina. Todo toma forma nuevamente y queda una obra con una causa y un efecto. Pero la causa y sobre todo el efecto son los principales motivadores para que esta obra quede en la galería sin saber si algún día valga la pena seguir lanzando brochazos de colores, quizás ocultando la causa ... y haciendo aun más oscuro el efecto. Todo y nada cambia.

Estoy en un viaje que aun no termina. Una fuerza que me impulsa a mantenerme erguido y a continuar caminando hacia un futuro quizás prospero (quizás no), pero que está cargado de energía, esfuerzo, angustia y mil sacrificios. Vale la pena? No lo se. Cuánto he ganado? Mucho. Cuánto he perdido? No lo quiero saber. Es por esto que la conclusión es otra. No estoy solo en mi viaje. Al parecer llevo a cuestas en esta aventura otras personas, otros sentimientos, otros sacrificios. Van conmigo sin estarlo. Y en el camino aparecen nuevas personas, nuevos sentimientos y nuevos sacrificios grabados en mis manos. Ya hace un año ... ya hace dos años ... ya hace tres .. el 14 de Octubre, ya hace siete. Cuánto ha cambiado todo!!! pero, ... todo sigue igual. Todo y nada cambia.

RaC

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